Esta película no trata de Chernóbil, sino del mundo de Chernóbil, del que sabemos muy poco. Han sobrevivido testigos presenciales: científicos, profesores, periodistas, parejas y niños. Hablan de su antigua vida cotidiana y luego de la catástrofe. Sus voces forman una larga, terrible pero necesaria, súplica que atraviesa fronteras y nos estimula a cuestionar nuestro statu quo.
Esta película luxemburguesa, dirigida por Pol Cruchten, es una adaptación del libro de Svetlana Aleksievitch “Voces de Chernóbil: La historia oral de una catástrofe nuclear”, que incluye testimonios de supervivientes y testigos de la catástrofe nuclear.
Esta película no trata de Chernóbil, sino del mundo de Chernóbil, del que sabemos muy poco. Han sobrevivido testigos presenciales: científicos, profesores, periodistas, parejas y niños. Hablan de su antigua vida cotidiana y luego de la catástrofe. Sus voces forman una larga, terrible pero necesaria, súplica que atraviesa fronteras y nos estimula a cuestionar nuestro statu quo.
Esta película luxemburguesa, dirigida por Pol Cruchten, es una adaptación del libro de Svetlana Aleksievitch “Voces de Chernóbil: La historia oral de una catástrofe nuclear”, que incluye testimonios de supervivientes y testigos de la catástrofe nuclear.